Las irlandesas Yvonne Farrell (Tullamore, 1951) y Shelley McNamara (Lisdoonvarna, 1952) se conocieron cuando estudiaban arquitectura en el University College de Dublín. En eso siguen 42 años después de abrir un estudio en la Calle Grafton, en el centro de Dublín. Con el nombre de esa calle bautizaron un despacho —Grafton Architects— que hoy ocupa varios edificios en el barrio. Era una manera de anunciar y arraigar su arquitectura de consenso —ni preciosista ni a la moda— capaz de atender a la vez a la construcción de la ciudad, a las necesidades del usuario y a la cultura y economía locales. Hoy describen su trabajo como “un marco para la vida” y su enfoque como humanista: atento a un tiempo al patrimonio, la tradición y las personas. Así, alejadas de las modas y los centros de poder y defensoras de la arquitectura como “servicio a la humanidad” fueron las primeras sorprendidas —declararon— al ser elegidas para comisariar la Bienal de Arquitectura de Venecia de 2018.
Algunos artículos para conocer su obra.
Farrell y Mcnamara las obras de las ganadoras del prestigioso pritzker 2020. (Idealista).
Pritzker para las arquitectas irlandesas Yvonne Farrell y Shelley McNamara. (El País).